La terapia de análisis conductual aplicado (ABA) no tiene una fórmula fija, por lo que muchos terapeutas utilizan este método para los niños del espectro autista. La terapia ABA puede ser diferente para cada niño, incluidas las habilidades que se tratan durante el tratamiento. Si un niño pequeño está atrasado en el desarrollo de sus habilidades de imitación y juego, la terapia ABA puede utilizarse para ayudar a desarrollar estas habilidades sociales.
Habilidades de imitación
Aunque las habilidades de imitación parecen sencillas, se trata de una pieza importante en el desarrollo de la primera infancia y en las interacciones cotidianas. La imitación incluye una serie de acciones diferentes, como imitar una acción (por ejemplo, agitar la mano), imitar un sonido (por ejemplo, saludar) o imitar una acción realizada con un objeto (por ejemplo, coger un bloque de un montón). Los niños que siguen la progresión típica del desarrollo empezarán a imitar aproximadamente a los ocho meses. Seguirán desarrollando esta habilidad (imitación más avanzada) a lo largo de los siguientes 10 a 24 meses (aproximadamente). Los padres suelen ser los que más influyen en el desarrollo de la capacidad de imitación de su hijo a lo largo del tiempo de juego.
Habilidades de imitación en niños con autismo: Cómo puede ayudar la terapia ABA
Los niños con espectro autista suelen experimentar retrasos en sus habilidades de imitación a una edad temprana. Esto es importante porque el retraso en las habilidades de imitación puede provocar retrasos en otras áreas del desarrollo, como el lenguaje y las habilidades de juego. Debido al impacto de la imitación en otras áreas del desarrollo lingüístico y social, la terapia ABA se utiliza ahora para reforzar las habilidades de imitación en los niños con autismo. A lo largo del tratamiento, los terapeutas de ABA incorporarán los intereses del niño a la terapia de imitación y le animarán continuamente a imitar sus comportamientos. Una forma de hacerlo es imitando primero las conductas del niño (para modelar esta habilidad). Como esta habilidad puede no surgir de forma natural, es importante que el terapeuta anime y motive al niño a hacerlo.
Los padres también pueden desempeñar un papel importante en la práctica de la imitación en casa en entornos de juego, imitando los comportamientos del niño (para, de nuevo, modelar la habilidad), y ayudando o motivando al niño a imitar comportamientos. En algunos casos, los padres y los terapeutas también pueden tener que indicar al niño que imite, si se necesita un apoyo adicional.
Habilidades de juego
Como se ha mencionado anteriormente, un retraso en las habilidades de imitación puede llevar a un retraso en las habilidades de juego. Hay seis tipos principales de habilidades de juego que el niño desarrolla: de causa y efecto, constructivas, exploratorias, físicas, de simulación y de juguete.
Habilidades de juego en niños con autismo: Cómo puede ayudar la terapia ABA
Los niños que se encuentran en el espectro autista suelen experimentar retrasos en el desarrollo de sus habilidades de juego interactivo, incluyendo el tomar turnos o compartir con otros. Los terapeutas de ABA pueden ayudar a los niños con trastorno del espectro autista (TEA) a desarrollar sus habilidades de juego modelando las habilidades de juego apropiadas y practicando el juego en un espacio controlado (antes de jugar con sus compañeros durante la escuela). La terapia ABA también puede tener como objetivo resolver los comportamientos problemáticos que se producen durante el tiempo de juego y sustituir estos comportamientos por otros más positivos. Como ocurre con muchos otros aspectos de la terapia ABA, ¡cuanto más se practique, mejor!
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Contribución de Rachel Brusstar.
